Cuidadoras de Cultura

Juana, Amancia, Graciela y Emilia son Madres Cuidadoras de la Cultura Qom (Toba) pertenecientes a la comunidad de Pampa del Indio, Chaco. Son el reflejo del rol de la mujer en la transmisión de la cultura, su misión es investigar y registrar su cultura, para valorizarla y trasmitirla mediante la elaboración de materiales didácticos para las escuelas. Para ello comenzaron investigando sus raíces, “para saber de dónde venimos y hacia dónde vamos” (Juana), elaboraron árboles genealógicos para determinar las etnias de sus antepasados, y recuperaron nombres propios, de animales y lugares.

La comunidad Toba, y hablamos en presente y no en pasado, aún conserva mucha tradición oral, leyendas, medicina natural, saberes y creencias; pero hoy tienen la necesidad de registrar para que no se pierda. “Nuestros antepasados transmitían oralmente y ahora nosotras, lo que ellos nos cuentan, lo pasamos al papel para que pueda quedar a los niños” (Amancia). Hoy la escolaridad de sus hijos es un espacio de lucha y resistencia, donde se enseña la cultura del blanco, y los auxiliares bilingües solo la traducen en lugar de transmitir la propia cultura.

A esta problemática se suman otras, por demás conocidas, como la propiedad privada, el desmonte y la soja, que producen un quiebre ancestral entre hombre y naturaleza. Imposibilitado el acceso al monte y negada la posibilidad de plantaciones; la comunidad Toba lucha por sustentarse y mantener su cultura.

Las Madres Cuidadoras de la Cultura siguen resistiendo, mirando al pasado para caminar al futuro. “Valorizamos la sabiduría de nuestros ancianos porque aprendemos de ellos y lo que nosotras tenemos que hacer es trasmitir para el futuro” (Juana). “Nosotras tenemos muchas fuerzas, seguimos adelante porque nos damos cuenta que lo nuestro tiene mucho valor, seguir transmitiendo, seguir valorizando” (Amancia).